Tintineo de campanillas. Rosario de emociones se suscitan, trémulas entre nuestras manos, entre nuestros dedos; semillas que brillan en nuestros ojos de niño; melodías de piano que alborean las primeras luces en nuestros rostros, que llenan de hogares encendidos, donde nos sentíamos tú y yo, esta nueva mañana.
La flauta es esa luz, esa luna hermosa, esa ternura, esas olas encendidas, esas olas en movimiento: la cuna donde tu ternura y la mía se mecen, donde el violín expresa melodías, donde esas lágrimas son esas huellas que nos llevan al pasado, esas luces donde inquietas laten tus manos y las mías; donde en tus ojos aún se desnuda mi alma, aún late dulce esa mirada de niño, esa voz plena, mágica, tierna... Gracias por tu música, por tus olas en movimiento.
Bella música, genial texto. ¡Felicitaciones, una exquisita combinación de música, imágenes y palabras. Saludos cordiales de la Sociedad Argentina de Escritores Filial Villa María- Córdoba.
ResponderEliminarBelleza y sobre todo tu maravillosa selección.
ResponderEliminarUn abrazo, querido amigo.
Hola Pruden, me alegro de tu regreso, espero que estés bien y que sigas escribiendo mucho. Un texto y una música estupenda. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Pruden, muy cierto que hacia mucho sin saber de tí y me alegro de saber, confirma que estás bien. Aprovecho para decirte que la música de la entrada y tus letras son muy bonitas.
ResponderEliminarUn beso!
Hola Pruden.
ResponderEliminarVisitando a Marita te he encontrado y paso a leer tus preciosas y profundas letras y saludarte.
Un abrazo.
Ambar.